gozarnos y alegrarnos en ti

I, NOSOTROS «vamos a gozar y alegrar en Ti.» No vamos a abrir las puertas del año con lúgubres notas del órgano, sino con suaves sonidos del arpa de gozo y retumbantes címbalos de alegría. «Venid, aclamemos alegremente a Jehová; cantemos con júbilo a la Roca de nuestra salvación.»

«NOSOTROS»
 que somos los llamados, los fieles y los elegidos, ahuyentaremos nuestros pesares, y extenderemos la bandera de nuestra fe en el nombre de Dios. Dejemos que otros se lamenten de sus aflicciones: nosotros que poseemos el árbol que puede dulcificar las aguas amargas de Mara, magnificaremos al Señor con gozo.

¡Oh!, Espíritu Eterno, nuestro poderoso Consolador, nosotros que somos el templo en el cual Tú habitas, no cesaremos jamás de adorar y de bendecir el nombre de Jesús.

«Nosotros VAMOS», estamos pues resueltos: queremos que Jesús tenga la corona de las delicias de nuestro corazón. No deshonremos a nuestro Esposo llevando el luto en Su presencia. Hemos sido destinados a ser los cantores del cielo, entonces ensayemos nuestro himno eterno antes de cantarle en los palacios de la Nueva Jerusalén.

«Nosotros vamos a GOZAR y ALEGRAR»: dos palabras con un significado poderoso, prometiendo una felicidad sin límites, y anunciando beatitud sobre beatitud. ¿Es necesario que nuestro gozo en el Señor tenga ahora algún límite? ¿No hallan los hombres que han recibido la gracia que su Señor es aun ahora el perfume del más dulce incienso? ¿Pueden tener en los cielos una fragancia mejor?

«Nosotros vamos a gozar y alegrar EN TI.» Estas últimas palabras son como el meollo de la nuez, la almendra en el corazón de la cáscara, el alma del texto. ¡Qué maravillosos cielos son preparados en Jesús! ¡Qué ríos de infinita felicidad hallan en Jesús su manantial y cada gota de plenitud!

O Señor Jesús, ya que Tú eres la herencia de Tu pueblo, favorécenos este año con un sentido tal de Tu preciosidad que desde el primer día hasta el último podamos «gozarnos y alegrarnos en Ti.»

Que el mes de enero se abra con gozo en el Señor, y el mes de diciembre se cierre con alegría en Jesús.

Comentarios

Entradas populares